El navegador del coche, ese gran amigo que nos guía en nuestros viajes está en una clara decadencia, por lo menos en lo que a ventas se refiere. Ya no es el regalo de moda, no es el compañero perfecto en nuestros viajes, los TomTom han dejado paso a los Smartphone, las aplicaciones y las tablets, capaces de hacer de navegadores GPS, con gran solvencia y sin nada que envidiarles.
Las
ventas de GPS han decaído un 25 % desde 2009, pasando de los 40 millones de navegadores a los 30 millones que se esperan vender este año. Por el contrario, los Smartphones continúan su constante e imparable crecimiento, estimándose unas ventas de 500 millones de unidades en 2011.
¿
Crisis económica o ser prácticos? Ambas premisas inciden en la caída de ventas de los navegadores. La crisis influye en los bolsillos de los consumidores, por lo que la compra de un dispositivo que utilizaremos pocas veces al año, resulta cada vez menos imprescindible en los hogares de todo el mundo.
Además, el consumidor empieza a ser mucho más práctico, por que llevar un navegador y nuestro teléfono móvil de viaje, con lo que ello implica, cargador, soporte o funda, desaparecen de nuestras maletas. Sólo necesitamos un solo aparato para no perdernos por las calles de cualquier ciudad del mundo.
Además otro dato que inclina la balanza a favor de los teléfonos, es el tema de las
aplicaciones GPS, ya que podemos incluso encontrarlas gratuitas. Podemos destacar las aplicaciones de TomTom, Sygic, Navv, Google, Nokia o Waze.
Aun así, no está todo dicho, la
decadencia de los navegadores GPS es clara, pero no definitiva, ya que la señal de estos está por encima de
los teléfonos móviles, por lo que los próximos años serán determinantes para el futuro de un sector en clara recesión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario